Con la llegada del verano y las altas temperaturas, es crucial que tomemos medidas adecuadas para proteger a nuestras mascotas del golpe de calor. Los animales son especialmente vulnerables a las condiciones extremas, y es nuestra responsabilidad garantizar su seguridad y bienestar durante las olas de calor. Hoy, desde Clínica Veterinaria Ciudad de los Ángeles, os recordamos algunos consejos clave para evitarles un golpe de calor.
En primer lugar, asegúrate de proporcionar un refugio fresco y sombreado para tu mascota en todo momento. Esto podría ser una habitación con aire acondicionado, un área con ventiladores o un lugar en la sombra al aire libre. Evita dejar a tu mascota en el coche, ya que las temperaturas pueden elevarse rápidamente y ser potencialmente mortales.
El acceso constante a agua fresca y limpia es esencial. Asegúrate de que haya suficientes recipientes de agua en toda la casa y en el exterior. Considera agregar cubitos de hielo al agua para mantenerla fresca durante más tiempo. También puedes proporcionar a tu mascota una piscina para que se refresque y juegue.
Limita la actividad física durante las horas más calurosas del día. Evita sacar a pasear a tu perro o jugar intensamente con tu mascota cuando el sol esté en su punto más alto. Opta por hacerlo por la mañana temprano o por la noche, cuando las temperaturas sean más suaves.
Ten en cuenta la sensibilidad de las patas de tu mascota. Las superficies como el asfalto o el cemento pueden calentarse mucho y causar quemaduras en las almohadillas de sus patas. Antes de salir a caminar, toca el suelo con tu mano. Si está demasiado caliente para ti, también lo estará para tu mascota.
Observa de cerca a tu mascota en busca de signos de golpe de calor, que incluyen jadeo excesivo, letargo, vómitos, diarrea y enrojecimiento de las encías. Si sospechas que tu mascota está sufriendo un golpe de calor, actúa rápidamente: llévala a un lugar fresco, aplícale compresas de agua fría y busca atención veterinaria de inmediato.