La gingivitis felina, ¿Qué es?
Las enfermedades periodontales son patologías muy habituales en las personas, pero también se trata de un problema común entre los gatos. La gingivitis felina es una dolencia que se caracteriza por la inflamación grave en las encías del gato, causando un babeo excesivo y la pérdida del apetito. Puede surgir a cualquier edad, aunque es especialmente frecuente cuando los gatos alcanzan una edad media o avanzada.
De esta manera, la gingivitis felina afecta seriamente a los dientes pudiendo derivar en una rotura o pérdida de los mismos.
¿Cuáles son sus causas?
Sus causas son muy diversas, desde problemas inmunológicos hasta una dieta demasiado blanda, sin embargo, la razón más frecuente de su desarrollo es la mala higiene bucodental. El sarro y la placa bacteriana van acumulándose causando la inflamación de las encías acompañada de una gran molestia al masticar lo que puede derivar en la pérdida del apetito y la bajada de peso de nuestro gato.
¿Cómo evitarlo?
Para que nuestro gato no se vea afectado por esta patología es aconsejable que siga una alimentación basada en piensos duros limitando la nutrición a base de comida blanda y húmeda. Esto servirá para protegerle de problemas bucodentales debido a que será más difícil que se queden restos en los dientes.
También es recomendable dar a nuestro gato un cachito de manzana o zanahoria como premio. Estos alimentos, al igual que nos ocurre a los humanos, sirven para eliminar los restos de las comidas, por lo que serán premios saludables y deliciosos.
Asimismo, lo más importante es cepillar periódicamente para eliminar el sarro y las bacterias. Para ello, deberemos emplear cepillos y geles especializados para gatos, debido a que los nuestros no son aptos para ellos. En el caso de que el sarro esté muy incrustado en los dientes será recomendable que se sometan a una limpieza.
En el caso de que observemos que nuestro gato pueda padecer gingivitis felina, lo mejor es acudir al veterinario.