A los gatos les suele gustar hacer sus necesidades en la arena. Pero, especialmente cuando son cachorros, tienen que aprender a utilizar la caja de arena. Por eso, hoy os damos unos consejos para que nuestra mascota aprenda a utilizar la caja de arena.
¿Cómo colocar la caja?
– La mejor opción es colocarlo de manera que el animal tenga una visión completa de la estancia y no pegado a la pared.
– Debe estar en una zona cómoda, protegida, y sin corrientes de aire.
– Muchos quieren intimidad, por este motivo debemos colocar la caja en un sitio apartado, tranquilo y lejos de los miembros de la casa. Pero, cuidado, no debemos colocarlo en un sitio muy retirado, que resulte inaccesible.
¿Cómo tiene que ser la caja?
– La forma y el tamaño del arenero son importantes para muchos felinos, algunos rechazan las cajas cerradas. Como recomendación, debe medir 1,5 veces el tamaño del animal.
– La arena es importante, debemos tener cuidado porque muchas mascotas rechazan la perfumada. Además, debe haber bastante cantidad, unos 4 centímetros aproximadamente.
¿Cómo limpiarla?
Que la caja esté limpia suele ser muy importante para que el gato la utilice. Se recomienda limpiar la caja un par de veces al día y vaciarla completamente una vez a la semana. Para su desinfección usaremos agua y jabón y evitaremos otros productos que pueden conseguir que el gato no se acerque a la caja.
¿Cómo conseguir que mi mascota la use?
Por un lado, si es pequeño y queremos acostumbrarle, debemos situarle dentro de la caja al despertarse y después de la comida. Luego, le cogeremos con suavidad la pata y escarbaremos con ella en la arena. Si lo hace, debemos darle un premio, por ejemplo, una galleta para gatos.
Por otro lado, si es adulto y de repente empieza a hacerlo fuera de la caja, puede padecer una enfermedad, como una dolencia renal. En este caso, deberemos acudir al veterinario.