Con la llegada de la primavera, las temperaturas suben y, como sabéis, varios parásitos aparecen y causan molestias en nuestros perros. Es lo que ocurre con las garrapatas y las pulgas y, por eso hoy, desde Clínica Veterinaria Ciudad de los Ángeles, os hablamos de algunos remedios caseros contra las pulgas.
Perros y pulgas: cómo protegerles de ellas
Lo primero será detectar si nuestra mascota se ha visto afectada por las pulgas. Hay que recordar que, en ocasiones, estos parásitos no llegan ni a medir 3 milímetros, pero esto no significa que sea difícil detectarlos. Simplemente hay que observarlos bien o identificar algunos de estos síntomas:
- Rascado efusivo y constante, que puede ir acompañado también de mordiscos
- Zonas sin pelaje o enrojecimiento en algunas zonas de la piel
- Pequeños residuos blancos o negros en el pelo (los blancos serían las larvas, los negros las pulgas)
Para evitar estas situaciones, podemos optar por antipulgas caseros, aunque hay que recordar que no todos los perros presentan la misma sensibilidad a los remedios que podemos elaborar.
Antipulgas con cítricos
Una de las cosas que más detestan las pulgas son los cítricos, por lo que las naranjas, los limones o la lima ayudan a repelerlas. Para ponerlo en práctica tenéis dos opciones: Frotar el pelaje del animal con la fruta o hacer una infusión con alguna de ellas y pulverizar después el cuerpo del animal una vez que esté fría.
Antipulgas con vinagre
El olor del vinagre también mata y aleja a las pulgas, por lo que preparar un repelente con vinagre blanco o de manzana puede ser una gran opción. No obstante, como no es agradable para los perros, no hay que abusar. Hay diferentes formas de incorporar este repelente pero la más efectiva es usarlo durante el baño mezclando medio vaso de vinagre con un poco de su champú. Una vez lo tengas, úsalo con normalidad y déjalo actuar durante 5 minutos, después aclara para quitar todos los restos del champú y del vinagre.
En nuestra próxima publicación, os hablaremos de otros remedios caseros para combatir las pulgas.
