Tener un gatito en casa puede ser una experiencia maravillosa, pero también puede ser desafiante cuando se trata de proteger tus muebles de las garras curiosas de tu pequeño amigo felino. Educar a tu gatito para que no destroce los muebles requiere paciencia, consistencia y algunas estrategias inteligentes. Hoy, desde Clínica Veterinaria Ciudad de los Ángeles, os damos algunos consejos.
En primer lugar, es crucial proporcionar alternativas adecuadas para que tu gatito pueda afilar sus garras de manera natural. Coloca varios rascadores en diferentes áreas de tu hogar, preferiblemente cerca de los muebles que suele atacar. Los rascadores verticales, horizontales y de cartón pueden ser opciones efectivas para satisfacer sus instintos.
Además, enriquece el entorno de tu gatito con juguetes interactivos y actividades estimulantes. Un gato aburrido es más propenso a dirigir su energía hacia los muebles. Juega con él regularmente y proporciona juguetes que simulan la caza, como plumas y pelotas.
Cuando atrapes a tu gatito arañando los muebles, no recurras al castigo físico. En su lugar, redirige su atención al rascador y alaba positivamente cuando lo use. Utiliza refuerzos positivos como golosinas o caricias para incentivar el comportamiento deseado.
El uso de productos repelentes también puede ser útil. Rocía los muebles con aromas desagradables para los gatos, como cítricos o vinagre, pero asegúrate de que no sea perjudicial para tus muebles. Otra opción es colocar cinta adhesiva de doble cara en los lugares donde tu gatito araña con frecuencia, ya que no les gusta la sensación pegajosa en sus patas.