Cuando tenemos un gato procuramos que haga sus necesidades dentro de su caja de arena, pero a veces nos resulta complicado enseñarles y que se acostumbren. Hoy, desde Clínica Veterinaria Ciudad de los Ángeles, os damos algunas recomendaciones para conseguirlo.
Para empezar, habrá que tener claro el lugar en el que vamos a colocar la caja. El gato deberá tener una visión completa de la habitación, no es recomendable que esté pegada a la pared, y también tendrá que ser una zona cómoda, protegida, sin corrientes de aire y, a ser posible, tranquila y apartada.
La caja, por su parte, es preferible que mida, como poco. 1,5 veces el tamaño del animal. La arena, por su parte, es mejor que no sea perfumada porque hay mascotas que la rechazan. La arena normal es una opción mucho más segura para que no tengáis que estar comprando diferentes tipos. Respecto a la cantidad, que sea de una altura de 4 centímetros aproximadamente.
Para que nuestro gato la use y no haya problema, nuestra recomendación es que se le acostumbre desde pequeño, llevándolo a la caja al despertarse y después de la comida. Luego, le cogeremos con suavidad la pata y escarbaremos con ella en la arena. Si lo hace, debemos darle un premio, por ejemplo, una galleta para gatos.Por otro lado, si es adulto y de repente empieza a hacerlo fuera de la caja, puede padecer una enfermedad, como una dolencia renal. En este caso, debéis acudir al veterinario.
