La higiene bucodental en perros es algo esencial para su salud, es por este motivo, que debemos dedicar un tiempo a la semana a eliminar el sarro que puede provocar estragos en su boca.
Normalmente, cepillar los dientes de un perro es una tarea compleja porque si ya es complicado que se estén quietos, aún más cuando estamos manipulando su boca. Por esto, es fundamental que sea una rutina que establezcamos desde que son cachorros. Esta semana, te damos unas recomendaciones para establecer estas rutinas:
Antes que nada, tenemos que acostumbrarles a inspecciones de cada parte de su cuerpo para que en el futuro no presenten problemas. Por lo que tocar su boca y sus dientes con suavidad y recompensarlo después, nos será de gran utilidad cuando se convierta en un perro adulto.
Cuando vayamos a cepillarle los dientes debemos realizar los siguientes pasos:
– Debemos comprar una pasta de dientes especial para perros, puesto que la que nosotros usamos no es válida.
– Extenderemos un poco en nuestro dedo y se la daremos a probar para que se familiarice con el sabor. Deberemos repetir esto varias veces hasta que empecemos a usar el dedo para frotar los dientes de modo que se acostumbre a esta práctica.
– Cuando se sienta familiarizado con el roce introduciremos el cepillo de dientes. Se trata de un paso más delicado ya que es más invasivo, así que tendremos que tener paciencia. Aplicaremos un poco de pasta de dientes en el cepillo y dejaremos que lo huela y lo lama.
– El modo de cepillar es el siguiente: