Una consulta veterinaria por lo general consiste en reconocer y explorar al paciente de una manera general y haciendo hincapié en las zonas que se creen afectadas por un problema médico. La palpación abdominal, auscultación del corazón, toma de temperatura corporal, exploración de ganglios retrofaringeos, exploración de los oídos, etc son algunos de los reconocimientos que se hacen habitualmente dependiendo de la afección del paciente.

Para esto, además de la experiencia y formación del veterinario, es muy importante que la persona que lo trae a la consulta sepa que le pasa al paciente, que le nota diferente a otras veces, que ha cambiado en su comportamiento, etc.

Una buena manera de ayudar al veterinario a llegar al diagnóstico puede ser grabar en vídeo al paciente en casa (o en el parque) cuando hace algún movimiento o tiene algún comportamiento que se cree diferente al de otras veces, por ejemplo una cojera (ya que a veces son intermitentes), algún quejido, ahullido, o en los casos algo mas extremos un ataque. Esta documentación audiovisual a veces es de gran ayuda.

Cuidados esenciales para tu perro si se baña en la playa - Clínica Veterinaria

El verano es una época perfecta para disfrutar de la playa, y si tienes un perro, ¡incluso mejor! A muchos perros les encanta nadar y jugar en el agua, pero es importante tener en cuenta algunos cuidados para asegurar que su experiencia en la playa sea segura y placentera. Hoy, desde Clínica Veterinaria Ciudad de los Ángeles, os recordamos algunos consejos a tener en cuenta si llevas a tu perro a la playa.

Cuidados esenciales para tu perro si se baña en la playa

Mantén la hidratación: Asegúrate de llevar suficiente agua fresca para tu perro. El agua salada del mar puede deshidratarlo, y es esencial mantenerlo hidratado durante su tiempo en la playa.
Evita el calor extremo: Las altas temperaturas en la playa pueden ser peligrosas para tu perro. Busca sombras para que descanse y evita las horas más calurosas del día para evitar el golpe de calor.
Lava la sal y arena: Después de nadar en el mar, enjuaga a tu perro con agua dulce para eliminar la sal y arena de su pelaje. La sal puede irritar su piel y la arena puede causar incomodidad si se acumula.
Cuidado con las olas y corrientes: Ten cuidado con las olas y corrientes del mar. No todos los perros son buenos nadadores, y algunos pueden sentirse nerviosos o asustados en el agua. Mantente cerca de él y no lo dejes nadar demasiado lejos.
Vigila su comportamiento: Algunos perros son más activos que otros, y el entusiasmo puede hacer que corran y jueguen sin descanso. Asegúrate de que no se sobreesfuerce y dale descansos regulares.
Control de pulgas y garrapatas: La playa es un lugar donde los parásitos como las pulgas y garrapatas pueden ser más frecuentes. Asegúrate de que tu perro esté protegido con un buen tratamiento antiparasitario antes de ir a la playa.
Recoge sus heces: Siempre lleva bolsas para recoger los desechos de tu perro. Es importante mantener las playas limpias y respetar las normas locales.

Siguiendo estos consejos, podrás asegurar que tu perro disfrute de la playa de manera segura y saludable.

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