Cuando se trata de proteger a nuestros perros y gatos de parásitos externos, como pulgas y garrapatas, existen tres opciones principales: pipetas, collares y pastillas antiparasitarias. Cada método tiene sus ventajas y desventajas, por lo que elegir el más adecuado dependerá de las necesidades y características de tu mascota. Hoy, desde Clínica Veterinaria Ciudad de los Ángeles, os hablamos sobre ello.
– Pipetas: Son soluciones líquidas que se aplican sobre la piel del animal, generalmente en la nuca. Son efectivas y de acción rápida, protegiendo contra parásitos durante un mes. Son ideales para mascotas que no toleran collares o pastillas, aunque requieren aplicación mensual y cuidado para evitar el contacto con agua o baños frecuentes.
– Collares antiparasitarios: Ofrecen protección a largo plazo, de hasta 8 meses, y son fáciles de usar. Son una buena opción para mascotas que pasan mucho tiempo al aire libre. Sin embargo, algunos animales pueden desarrollar irritaciones en la piel y, en casos raros, pueden soltarse o perderse.
– Pastillas antiparasitarias: Actúan desde el interior del organismo, eliminando parásitos externos con gran eficacia. Son ideales para mascotas que no toleran aplicaciones tópicas. Sin embargo, no protegen contra futuras infestaciones, por lo que se suelen utilizar junto con otros métodos de prevención.
La elección entre pipeta, collar o pastilla dependerá de la comodidad y necesidades de tu mascota, no obstante, consultar con el veterinario te ayudará a decidir la mejor opción para mantener a tu perro o gato protegido y saludable.