El moquillo es una grave y contagiosa enfermedad que afecta principalmente a cachorros de hasta 5 meses y a perros que no han sido vacunados, aunque pueden sufrirla a cualquier edad. Es transmitida mediante un virus, por lo que un perro esté enfermo del moquillo debe estar presente o haber contaminado el lugar para que se produzca el contagio.
Esta enfermedad afecta al sistema digestivo, al nervioso y a las vías respiratorias, provocando una serie de daños que pueden llegar a ser mortales.
Los síntomas del moquillo son muy distintos dependiendo del caso, por este motivo, es complicado diagnosticar sin realizar una prueba.
Si detectamos que nuestra mascota tiene alguno de estos síntomas, la mejor opción es acudir al veterinario para que realice un diagnóstico preciso. Es fundamental que actuemos cuanto antes para aumentar las posibilidades de supervivencia del animal.
¿Cómo prevenir esta enfermedad?
Lo más importante para la prevención de esta grave enfermedad es vacunar a nuestra mascota a los 45 días de vida, aunque nunca es tarde para vacunarle, y siempre es recomendable que el perro sea vacunado tenga la edad que tenga.
Del mismo modo, existen una serie de medidas que también pueden ayudar a combatir la enfermedad del moquillo y que podemos tener en cuenta: