La salud dental de tu perro es tan importante como la tuya. Muchas veces se pasa por alto, pero cepillar los dientes a tu perro es esencial para prevenir enfermedades periodontales, mal aliento e incluso problemas en órganos internos.
Aquí, os explicamos paso a paso cómo lavar los dientes a tu perro, porque una boca sana es clave para que tenga una vida larga y feliz.
Guía completa para lavar los dientes de tu perro
Lavarle los dientes a tu perro no tiene por qué ser complicado. Con una buena rutina, un poco de paciencia y los materiales adecuados, nuestro compañero tendrá una boca limpia y sin sarro.
¿Qué necesito?
Antes de empezar, asegúrate de tener lo siguiente preparado:
- Cepillo de dientes para perros. Elige uno de tamaño adecuado. Hay cepillos con cabezales pequeños o dedales de silicona que son ideales para empezar.
- Pasta dental específica para perros. Nunca uses la misma pasta de dientes que usas tú, ya que contiene flúor y otros componentes tóxicos para ellos. Las pastas para perros vienen con sabores agradables como pollo o carne.
- Ambiente tranquilo. Busca un momento del día en el que tu perro esté relajado, sin muchas distracciones, y en un espacio cómodo para ambos.
Antes de empezar
Para que el cepillado sea efectivo y agradable, te recomendamos esto:
- Haz sesiones breves, sobre todo al principio. De 1 a 2 minutos son suficientes los primeros días.
- Elige un momento tranquilo, como después del paseo o al acabar el día.
- Ve despacio, no intentes hacer todo en una sola sesión.
- Elogia a tu perro solo si colabora, para reforzar su conducta positiva. Si se pone nervioso, para y vuelve a intentarlo más tarde.
Rutina de limpieza paso a paso
Os dejamos aquí nuestra guía práctica para que sepas cómo cuidar los dientes de tu perro con un buen cepillado:
- Acostúmbrale a la pasta de dientes. Deja que la lama de tu dedo unos días antes de empezar a cepillar. Así se familiariza con el sabor y el olor.
- Introduce el cepillo. Una vez esté cómodo con la pasta, pon una pequeña cantidad en el cepillo y acércalo suavemente a sus dientes. Puedes empezar por los colmillos, que son mucho más accesibles.
- Cepilla los dientes hacia el fondo. Usa movimientos suaves y circulares. Intenta llegar poco a poco a los molares, donde suelen tener más placa.
- Cepilla todos los dientes. Aunque al principio no consigas cepillar toda la boca, ve aumentando el tiempo de cepillado y el número de dientes. Verás como poco a poco si se deja.
- ¿Se ha portado bien y ha colaborado? Dale un premio. Con una caricia o una golosina dental es más que suficiente.
¿Cómo lavar los dientes de mi perro si no tengo dentífrico?
Si no tienes a mano pasta dental para perros, puedes cepillarle los dientes con alternativas naturales y seguras, aunque no aconsejamos hacerlo con frecuencia sin la pasta adecuada. Como algo puntual, está bien, pero de normal deberías usar su pasta de dientes. Como urgencia, puedes usar:
- Agua con un poco de bicarbonato sódico. Úsalo solo de forma muy puntual y en cantidades mínimas, ya que puede ser abrasivo.
- Aceite de coco. Tiene propiedades antibacterianas y suele gustarles el sabor.
- Cepillado solo con el cepillo húmedo. No es muy efectivo, pero es mejor que nada y puede ayudar a reducir la acumulación de placa si se hace regularmente.
- Juguetes dentales también ayudan a limpiarles los dientes mientras lo mastican.

¿Cómo puedo quitarle el mal olor a mi perro de la boca?
La mejor forma de prevenir el mal aliento es mantener una buena rutina de limpieza dental y realizar revisiones periódicas en la clínica veterinaria. Para quitarle el mal aliento, tienes que:
- Cepillar sus dientes 2-3 veces por semana.
- Usar premios o juguetes masticables diseñados para su salud dental.
- Añadir en su dieta alimentos u otros suplementos que favorezcan su salud dental.
- Consultar con tu veterinario si el mal aliento no se va, porque puede estar relacionado con enfermedades periodontales o digestivas.
Nuestros consejos para lavar los dientes a tu perro
Para acabar, os dejamos nuestros consejos como veterinaria:
- Comienza cuanto antes, porque si tu perro aún es cachorro, es mucho más fácil habituarlo.
- Sé constante, ya que el cepillado debe formar parte de su rutina semanal.
- No le castigues si se pone nervioso, simplemente espera un poco e inténtalo de nuevo, porque la paciencia es clave.
- Haz del cepillado un momento positivo, sin prisas y con mucho cariño.
- Acude al veterinario para realizar limpiezas dentales profesionales al menos una vez al año, especialmente si tu perro es mayor o tiene tendencia al sarro.
Ahora que ya sabes cómo lavar los dientes a tu perro, recuerda que una buena higiene bucal no solo mejora su aliento, sino que previene enfermedades que pueden afectar a todo su organismo. Un cepillado a tiempo puede evitar muchos problemas en el futuro.