Sabemos que muchos gatos se niegan a recibir la medicación, por lo que a veces se vuelve algo realmente tedioso y complicado de conseguir. Incluso el dueño más experimentado se puede encontrar con arañazos, bufidos y carreras por toda la casa.
Por eso, si quieres saber cómo darle una pastilla a un gato de forma segura, efectiva y sin estrés para los dos, os contamos nuestros mejores trucos de veterinaria para administrar los medicamentos orales a felinos. Vamos a ello.
Cómo darle una pastilla a un gato con comida
Esconder la pastilla dentro de la comida es la forma más sencilla si tienes suerte. De todas formas, no sirve cualquier alimento, ya que hay ciertas comidas que debes evitar para no generar desconfianza.
No uses un alimento habitual
Es muy importante que no mezcles la pastilla con su comida habitual. Si lo haces y tu gato detecta algo extraño (olor, sabor, textura), puede rechazar ese alimento para siempre. Tienen mucha memoria sensorial, así que si relacionan un sabor desagradable con un alimento que antes les gustaba, pueden dejar de comerlo por completo.
¿Qué comida utilizar?
Hay que despertar un poco la curiosidad del gato, así que elige una comida que no forme parte de su dieta diaria. Tienes muchas opciones para dar una pastilla a un gato con comida:
- Atún enlatado en agua, muy bueno porque su olor fuerte camufla el sabor del medicamento.
- Pollo cocido desmenuzado, sin especias ni sal.
- Queso crema. Muchos gatos lo adoran por su textura, y es fácil esconder una pastilla en su interior.
- Comida húmeda para gatos. Puedes hacer una bolita con un trozo y meter la pastilla dentro.
Consejos para darle la pastilla directamente a tu gato
Puede que tu gato ya se sepa el truco de la comida y no haya forma de engañarle, así que te tocará administrarle la pastilla directamente.
Cómo sujetarlo
Lo primero es asegurar una buena sujeción sin forzar ni asustar a tu gato. Puedes envolverlo con una toalla como si fuese un burrito, dejando solo la cabeza fuera.
Busca un lugar tranquilo, sin distracciones, y habla en voz baja para no alterarlo. Si estás nervioso, él lo notará. También te aconsejamos que pidas ayuda a otra persona para sujetarlo suavemente mientras tú le das la pastilla, es mucho más fácil entre 2.
Cómo administrarle la pastilla paso a paso
Sigue estos pasos:
- Sostén su cabeza desde arriba con una mano, colocando el pulgar y el índice justo detrás de sus colmillos.
- Inclina ligeramente su cabeza hacia atrás. Esto hará que abra la boca de forma natural.
- Utiliza el dedo anular de la mano con la que sostengas la pastilla para abrir la mandíbula inferior, y colocar la pastilla lo más atrás que puedas en el centro de su lengua.
- Cierra la mandíbula con suavidad y acaricia su garganta o sopla suavemente sobre su nariz para estimular el reflejo de deglución.
- Puedes darle un poco de agua con una jeringa para que la pastilla pase más fácil por el esófago. Después, puedes darle una pequeña golosina para asegurarte ya al 100%.

Pasos para darle una pastilla a un gato agresivo
Si tu gato es de los que se transforman en una pantera con solo oír el ruido del blíster de pastillas, no te preocupes, también hay soluciones para eso. Sigue este paso a paso para saber cómo darle una pastilla a tu gato:
- Prepara todo bien con antelación: la pastilla, la toalla para envolverlo y, si lo tienes, un guante grueso.
- Asegúrate de que el entorno está en calma, es decir, sin ruidos y sin otros animales o personas alrededor.
- Envuelve al gato con firmeza pero sin apretar demasiado, dejando la cabeza fuera.
- Utiliza un lanzador de pastillas o una jeringa especial para pastillas. Así no tendrás que poner los dedos dentro de su boca.
- Coloca la pastilla al fondo de su lengua, cierra su boca suavemente y acaricia su garganta.
- Dale un refuerzo positivo. Si por fin se ha portado bien, recompénsale con su comida favorita.
- Si se sigue resistiendo violentamente, no insistas una y otra vez, consulta con tu veterinario.
¿Cómo darle una pastilla a un gato con jeringa?
En algunos casos, la pastilla puede disolverse en agua (si el veterinario lo permite) y administrarse con una jeringa sin aguja, directamente en la boca del gato. Aquí os explicamos cómo hacerlo:
- Lo primero es consultar con tu veterinario si ese medicamento se puede disolver sin perder eficacia, porque no con todos se puede hacer.
- Tritura la pastilla hasta hacerla polvo.
- Disuélvela en una pequeña cantidad de agua (1-2 ml) en un vasito limpio.
- Llena la jeringa y prepara el entorno como os hemos comentado anteriormente.
- Coloca al gato en posición segura y sujétalo o envuélvelo con una toalla.
- Introduce la jeringa por un lateral de la boca, justo detrás del colmillo, y administra el líquido poco a poco, dejando que trague entre cada pequeño chorro.
- Importante, no introduzcas la jeringa en la garganta ni le des demasiado líquido de golpe, porque podría atragantarse o aspirar el medicamento.
Últimos consejos para darle la pastilla al gato
Ya sabes cómo darle una pastilla a un gato y, aunque no es tarea fácil, con paciencia, práctica y cariño, conseguirás que tu gato tome su medicación.
Nuestro primer consejo es que no tritures ni diluyas la pastilla sin consultar antes con tu veterinario, porque muchos medicamentos pierden la eficacia o pueden irritar el estómago si se administran de otra manera. También deberías ser paciente y mantener la calma, porque los gatos perciben muy bien el estrés y reaccionan en consecuencia, así que si te frustras, será más difícil.
Ve probando diferentes métodos hasta que encuentres el que mejor funcione con tu gato. Tampoco uses fuerza bruta, porque solo empeora la situación.
Te aconsejamos que uses un pastillero, muy útil para colocar la medicación en la parte posterior de su lengua. Y si tu gato desaparece cada vez que ve una pastilla, recuerda que también existen formas alternativas: jarabes, cápsulas de gelatina o incluso inyecciones, según el caso. ¡Hasta la próxima!